
van ustedes a perdonar que siga perdiéndome entre la belleza de las palabras...
que pretenda, además, darlas algun sentido.
“but i, being poor, have only my dreams. i have spread my dreams under your feet; tread softly, because you tread on my dreams.”
pero yo -siendo pobre- tengo solo mis sueños. extendí mis sueños bajo tus pies; camina con cuidado, por que caminas sobre mis sueños.
apelo a que el contexto en el que encontré estos versos me sugestionó en su favor.
pero constato que, aun hoy, siguen siendo algo que recuerdo con agrado.
para ello,
quizá haya tenido que asumir mi debilidad ante la agreste carga seductora de todo victimismo.
o,
deba quedarme sólo con la elegancia de tu/mi pie hollando distraído en alguna playa, al tiempo que mueve una concha o huye de la pequeña ola.
pero bueno,
estabamos en que se trabajan orgullos y victimismos...
y
sabiendo que en todo lo poético y por el tema del marketing se tiende a dramatizar,
puede considerarse que la percepción de victimismo no es más que una torpe exhibición de mi miedo/orgullo y -yeats- nos enfrenta, bella y llanamente, con la realidad a cámara lenta de dos (o más) personas comunicando sobre algo que puede ser la más sencilla de las cosas.
algo que, como cualquiera sabe, nunca es sencillo; aunque sí cotidiano.
ejemplo de comportamiento susceptible de inspirar la metáfora "yo extiendo mis sueños bajo tus pies":
una individua, laDebo, al personarse frente a una pescadería y encontrar un pequeño grupo de más individuas, pregunta:
-quién da la vez?
evidentemente la protagonista de nuestra historia...
quiere comprar algo de lo que en la pescadería se oferta,
quiere conocer el orden establecido hasta su llegada y
quiere gozar, en la mayor brevedad, de las ventajas que le son propias al que ya ha llegado
hace evidentes sus sueños. extiende -parte de- sus sueños a los pies de la concurrencia que interesa en la pescadería.
aunque su expresión pueda parecer distraída al observador casual, otro más avezado no duda en señalar notas en su comportamiento que nos dicen lo contrario y hacen ver que, tras hacer parcial exhibición de deseos,... acecha:
llegado al punto, rapidamente, analizará las respuestas que ha provocado y seleccionará la más apropiada a sus intereses
-invariablemente intentará dar por buena la primera opción, que se le dé con alguna credibilidad, y
-hará oídos sordos a terceras personas con la esperanza de adelantar, ladina y eficazmente, a toda aquella que pretenda que la mera presencia es suficiente para establecer prioridad sin que haga falta el susodicho "quién da la vez".
-valiéndose de la confusión creada y a su amparo, laDebo, se sitúa ya en la primera fila a la que ha conseguido llegar -con su carro- merced a una audaz maniobra ensayada ejecutada con éxito.
habiendo quedado gran parte del pequeño grupo a su espalda, que además se encuentra todavía distraído.
estando su antecesora, en el mejor de los casos, a su lado. y
siendo más de uno los pescaderos que dan servicio al grupo...
-espera, acecha de nuevo, la mirada inquisidora del pescadero libre que se extienda sobre el respetable, para proclamar en el momento adecuado el más tímido posible, dentro de lo sonoro, "póngame medio de gambas" al que, tras el rebrote del indignado bullicio, habrá de añadir un ya menos tímido "que llevo prisa".
un "que llevo prisa" que justifica la manifiesta falta de delicadeza y espolea al pescadero, que cierra los ojos al peligro y reza una pequeña oración si es nuevo o, siendo experimentado, hace pausa y establece el silencio para que, la que calle, lo haga para siempre.
terrible momento.
...
el alcance, dentro de la historia común de la humanidad, de este episodio tiene que ver con su condición y, además, habrá que considerar con el mayor interés su ocasión.
no en vano, podría afirmarse que, cada una de las implicadas en el pequeño hecho referido, en alguno de los momentos que se suceden, valoró la oportunidad de emprender acciones diversas, de cierta contundencia, en el presente y/o para el futuro. amén de lamentarse por las que pudieran haberse tomado de haberse conocido la maniobra con antelación.
un sin-vivir diario donde, sin dudar de los buenos sentimientos de yeats, los sueños... sueños son.
besos