miércoles, 8 de septiembre de 2010

iglesias y personas


parecerá que la ola anticlerical ha llegado al blog de ustedes;

que, traidora y cobardemente, al amparo de un mísero detalle, me ensaño,

en la figura de un obispo gallego,

con -quizá- la más decadente y débil de las muchas formas con que se nos gestiona la esperanza y el miedo;

que, habiendo tantos botones, la distracción en uno o dos de ellos no es significativa cualquiera que sea su posición en el conjunto.

pero..., aunque así sea, quiero señalar el desaliño observado en acto público;
y justificar mi indiscreción con frases tales como:
"a mí me ha hecho gracia",
en lo ocioso, y
"espero se haya lavado las manos",
en lo práctico.

con el deseo de que se quede en ocioso, ya que en compañía de alzamiento, partición y repartición de ostia, besamanos y demás, podría llegar a suponer molestias de salud.

comenta un amigo que "estamos ante la evidencia de que no mean sentados como todos creíamos".

también quiero hacerles participes en este post -por la temática similar- de una coletilla que me viene refiriendo, de un tiempo a esta parte, otro amigo mío:

"en mi huerto te crie,
del pesebre de mi burra eres hermano y
el fruto nunca te vi:

los milagros que usted haga,
que me los cuelguen a mí aquí..."
(tiéntese la propia entrepierna)

se trataría del primer rezo hecho por un vecino a la figura de un san josé, tallada a partir de la madera de un nogal cortado en el huerto de ese mismo vecino.
y de la que se obtuvo, además, un pesebre.

señala que mi amigo no acaba de creerse lo de los santos, vírgenes y milagros.
o que es muy guasón.

besos

"san cucufato san cucufato,
los huevos yo te ato.
y hasta que no aparezca,
no te los desato"
y


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